Apoyo a los canales cortos de comercialización con políticas que acerquen productores y consumidores.
Ficha técnica
- Ámbito:
- Economías locales emergentes
- Fecha proyecto:
- 05.2019
- Estado:
- En ejecución
- Tipo:
- Actividades, Estudios y publicaciones, Proyectos
- Público:
- Ayuntamientos, Ciudadanía, Empresas, Entidades
- Temas:
- Comercio, Sistema alimentario
- Finalidad:
- Acercar los productores y los consumidores de productos agroalimentarios del territorio de manera que se impulse la responsabilidad social y ambiental, la trazabilidad de la cadena y el comercio y la producción agroalimentaria de proximidad.
Descripción
El proyecto quiere apoyar los canales cortos de comercialización con políticas que acerquen productores y consumidores y posicionar el AMB como agente dinamizador de estos proyectos, además de facilitar el desarrollo de iniciativas piloto y pruebas prácticas.
Los productos locales y de proximidad llegan al consumidor principalmente a través del circuito corto de comercialización o de la venta directa por parte del productor. Como un primer paso para la estrategia de impulso de la política alimentaria, el grupo de trabajo del Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona ha definido estos circuitos como las cadenas de distribución que contribuyen a mitigar el cambio climático, con un número reducido de intermediarios entre productor y consumidor, con el área de procedencia de los productos restringida al territorio de Cataluña y con modelos relacionales de equilibrio entre sociedad y territorio.
En el territorio metropolitano, cada productor usa unos 3 o 4 canales de venta, con la venta directa en la finca y la venta en tienda de terceras personas como opciones prioritarias. Estas opciones contribuyen a la conservación del territorio, evitan los intermediarios, ayudan a ampliar el conocimiento de la cadena agroalimentaria, a propiciar hábitos de consumo más saludables y a la transmisión directa del producto.
Un estudio encargado al Instituto Cerdà por el grupo de trabajo del Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona indica varios aspectos a mejorar en este campo: ampliar la información sobre la venta de proximidad y el sistema alimentario metropolitano, mejorar la poca coordinación de las estrategias y acciones de las administraciones públicas dentro del territorio y el conocimiento de la normativa existente, y establecer un control de los sistemas de acreditación. En cuanto al fomento de la demanda, es necesario crear estructuras de comercialización de proximidad, trabajar en la capacitación de los productores para gestionar canales comerciales e incentivar la promoción de la venta de proximidad.
Los productos locales y de proximidad llegan al consumidor principalmente a través del circuito corto de comercialización o de la venta directa por parte del productor. Como un primer paso para la estrategia de impulso de la política alimentaria, el grupo de trabajo del Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona ha definido estos circuitos como las cadenas de distribución que contribuyen a mitigar el cambio climático, con un número reducido de intermediarios entre productor y consumidor, con el área de procedencia de los productos restringida al territorio de Cataluña y con modelos relacionales de equilibrio entre sociedad y territorio.
En el territorio metropolitano, cada productor usa unos 3 o 4 canales de venta, con la venta directa en la finca y la venta en tienda de terceras personas como opciones prioritarias. Estas opciones contribuyen a la conservación del territorio, evitan los intermediarios, ayudan a ampliar el conocimiento de la cadena agroalimentaria, a propiciar hábitos de consumo más saludables y a la transmisión directa del producto.
Un estudio encargado al Instituto Cerdà por el grupo de trabajo del Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona indica varios aspectos a mejorar en este campo: ampliar la información sobre la venta de proximidad y el sistema alimentario metropolitano, mejorar la poca coordinación de las estrategias y acciones de las administraciones públicas dentro del territorio y el conocimiento de la normativa existente, y establecer un control de los sistemas de acreditación. En cuanto al fomento de la demanda, es necesario crear estructuras de comercialización de proximidad, trabajar en la capacitación de los productores para gestionar canales comerciales e incentivar la promoción de la venta de proximidad.